¡Hola, cazadividendos! Hoy os traigo un artículo diferente. Son las reflexiones de José Manuel, un lector de Toledo que conocí hace unos meses y con el que hablé largo y tendido por correo electrónico. Un tipo interesante, sencillo y profundo a la vez, que acabó enviándome el texto sobre el que se basa este artículo. No tiene nada que ver con la bolsa, pero sospecho que encierra enseñanzas de vida que nos pueden ayudar en aspectos fundamentales para alcanzar la felicidad. Porque ¿no va la vida precisamente de eso, de intentar ser feliz? Pero feliz de verdad. A veces parece que lo olvidemos. El texto me gustó mucho, tanto que le pedí permiso para adaptarlo y publicarlo. Espero que os guste a vosotros también.
Contenidos
¿Por qué deseas curarte?
Mi amigo, el Dr. Aurelio, es uno de los médicos que más admiro. Antes de comenzar a pasar consulta siempre formula al paciente la misma e inesperada pregunta: “¿Por qué desea curarse?”. La reacción del paciente suele ser de sorpresa e incluso de incomprensión. Así que él tiene que explicarlo un poco mejor. En el fondo, lo que está preguntando es: «¿Qué espera hacer con su vida cuando se cure? ¿Está seguro de que merecerá la pena?”.
Lo que el Dr. Aurelio pretende con estas preguntas es que el paciente se fije una meta. Por ejemplo: “Tengo que curarme porque quiero hacer estas cosas (lo que sea), que son de suma importancia para mí o para alguien a quien quiero”. De esta manera, según él, las probabilidades de superar la enfermedad aumentan considerablemente, en especial para aquellos que padecen enfermedades crónicas desde hace tiempo: su curación cobra sentido, su vida sufre una transformación y además de sanar el cuerpo, puede también ayudarle con su espíritu y , por qué no, con su cartera. Una vez que el enfermo responde a esta pregunta, el enfermo se convierte en una persona nueva y la curación puede llegar a acelerarse y, en casos excepcionales, hasta ser inmediata.
Sin embargo, no hace falta esperar a estar gravemente enfermo para vivir esta transformación. Más bien al contrario. Deberíamos transformarnos antes de estar en una situación límite
¿Cuáles son tus reglas?
Cuando yo tenía 21 años, mi primer jefe, un hombre de éxito continuamente adulado por su entorno, me contó que para gozar de una vida plena debía comenzar a desarrollar una filosofía personal que guiará mis decisiones diarias. Ello me permitiría cumplir aquellos objetivos que yo mismo me hubiese fijado, sin tener que vivir continuamente a merced de los acontecimientos. “Lo primero que debes hacer”, me dijo, “es crear un conjunto de reglas de vida que te ayuden a reducir el estrés y a no despilfarrar energía emocional, para ser más productivo y tener más tiempo para tu familia y tus amigos”.
Y eso fue lo que no hice. Y, pasado el tiempo, puedo afirmar que esa decisión transformó mi vida. Por eso hoy he decidido compartir aquí mis reglas. Es un ejercicio muy personal, y en el fondo muy íntimo, pero estoy convencido de que es el primer paso, y posiblemente el más importante, para “cambiar de vida”.
No pretendo abrir un debate sobre si mi filosofía personal es correcta o incorrecta ni es mi intención ser ejemplo de nada, pero creo que estas líneas pueden ayudar si se leen con mentalidad abierta. La idea es empujar a una reflexión personal que nos permitirá encarar la vida de una manera más positiva y ser (más) felices. Suena a tópico, pero mañana es tarde, como con las inversiones.
Quizá alguno ya tenga esas normas claras en la cabeza. En ese caso, le animo a que las ponga por escrito. Escribir ayuda a tomar conciencia y a comprometerse con uno mismo. Se pueden adoptar normas para cada aspecto de la vida, desde la salud hasta la pareja o la familia.
Estas son las mías
Como veréis, mis reglas son muy prácticas y en ocasiones muy terrenales. Y es que así soy yo. En mi opinión, cada uno debe encontrar su propio camino, definir sus reglas y seguirlas. Es más, la mayoría de gente así lo hace, pero sin reflexionar sobre si esas reglas son o no son buenas para su bienestar y felicidad. Vamos allá:
- Llevar una vida ordenada y ser disciplinado. La disciplina por lo general consiste en hacer justo lo contrario de lo que de verdad nos apetece hacer en ese momento. Los medios más sencillos para ser disciplinado son:
- Fijarse plazos.
- Descubrir lo qué se nos da bien y lo más importante para nosotros, y concentrarse en ello.
- Sustituir las malas costumbres por buenas costumbres, una a una, empezando por aquellas que nos resulten más fáciles de cambiar.
- Aprovechar el tiempo. El tiempo es la riqueza más grande y lo único que puede impedirnos llegar a cumplir algo. El tiempo perdido no se vuelve a recuperar, por lo que malgastar el tiempo es malgastar la vida. Por ello me esfuerzo en no involucrarme en actividades en las que el único objetivo sea “pasar el tiempo”. La elección más importante de nuestra vida es elegir en qué queremos invertir nuestro tiempo.
- Pensarlo bien antes de prometer o comprometerme con algo, sea lo sea. Las promesas son contratos que deben cumplirse. Y eso incluye los acuerdos a los que llego conmigo mismo.
- Prudencia. Siempre hay que esperar lo mejor, pero prepararse para lo peor. Los arrepentimientos de verdad llegan solamente cuando no se ha hecho todo lo posible. Debemos hacer más de lo que se espera de nosotros. La vida es sencilla si hacemos frente a las dificultades y se complica cuando simplemente buscamos lo fácil.
- Dormir lo suficiente y comer bien. Siempre procuro acostarme y despertarme a la misma hora, durmiendo siempre lo suficiente. Es una regla que no me salto salvo por algún motivo personal o profesional realmente importante. Sólo tomo alimentos naturales ricos en nutrientes, evito la cafeína después de la una de la tarde y no bebo alcohol al menos desde tres horas antes de irme a dormir. Me tomo alguna licencia, como fumar algunos cigarrillos…
- Todas las mañanas me dedico a escribir durante al menos hora y media antes de ponerme a hacer cualquier otra cosa. Nunca miro mis e-mails antes de las nueve de la mañana.
- Cada día, después de terminar mi trabajo, hago una lista de las tareas para el día siguiente. También escribo un diario en el que anoto los objetivos de mi vida y los progresos que voy haciendo en mis inversiones,..
- Intento evitar cualquier enfrentamiento o conflicto, tanto en persona como por internet. Son una pérdida de tiempo y energía. Si no tengo razón o estoy equivocado, me disculpo y soluciono el problema lo antes posible. No obstante, los demás están en su derecho de no aprobar lo que hago o no estar de acuerdo conmigo aunque yo esté convencido de su fundamento, pero no voy a ponerme a discutir. Cuando me encuentro en una situación potencialmente conflictiva, respiro hondo, me paro, suelto aire y vuelvo a concentrarme en mi trabajo y en mis objetivos, sin dejarme arrastrar hacia otro terreno en el que tengo mucho que perder y nada que ganar.
- Siempre intento tener en la cabeza estas dos consignas:
- Relativizar. Y con ello me refiero a que la vida está llena de pequeñas nimiedades que pueden bloquearnos por completo si decidimos darles importancia. La vida es demasiado corta como para centrarnos en algo distinto a nuestros objetivos principales. Cada uno de nosotros tiene una misión que cumplir consigo mismo y con los demás; no hay que perder el tiempo en problemas secundarios.
- Nada es para siempre. Esta fórmula me ayuda tanto en los buenos momentos como en los malos. En los días difíciles de mucho trabajo y preocupación, sé que nada es para siempre. El pequeño sufrimiento por el que me toca pasar ahora pronto quedará en el olvido, cuando recoja los frutos de mi trabajo o cuando piense en todo lo que he conseguido. Y en los buenos momentos trato de recordar que no debo dejar de lado mis objetivos aunque las cosas vayan bien. Sean cuales sean las alegrías del momento, nunca debo abandonarme a la pereza, porque aún quedan muchas cosas por hacer y mejorar en el mundo,.
- Nunca seré quien no quiera ser. No seré ruin, ni tendré celos, ni envidias, ni cederé ante ningún otro sentimiento fácil. No haré caso a rumores ni criticaré a nadie, esté con quien esté y sea donde sea. No seré negativo, porque ser positivo es mucho más sencillo. Me rodearé de personas que me aporten experiencias, conocimientos y valores y que enriquezcan mi vida,.
Estas normas me permiten vivir con menos complejos, más energía y ser más productivo. Evidentemente no estoy diciendo que todos los días consiga cumplirlas todas, pero sí me marcan unas pautas de actuación, y cuando corro el riesgo de pasarme de la raya, me suena una alarma interior…
La filosofía personal de cada uno
En el fondo puedo llegar a entender a todos aquellos que en un primer momento sientan cierto recelo hacia el escrito de hoy, pues parece alejado de los temas habituales. Por eso no hay que olvidar que en mi propuesta no se pretende sentar cátedra, dar una lección moral o juzgar si mis reglas son válidas o no. El objetivo de esta lista de normas es estimular a la reflexión personal para permitirnos alcanzar nuestras metas más fácilmente.
Todas las semanas todos tomamos decisiones que nos provocan remordimientos e incluso sentimiento de culpa. Pero también tomamos decisiones que sabemos que son correctas, incluso aunque cueste tomarlas. ¿No sería más bonita la vida si nos costara menos tomar más decisiones correctas? ¿No nos permitiría el hecho de tomarlas llegar a nuestra meta dando menos rodeos? Pues bien, justo para eso sirven las reglas de vida de cada uno o su filosofía de vida personal. Nadie dice que sea fácil. Hacer lo correcto no tiene por qué ser más fácil y muchas veces puede implicar romper con todo y con todos, pero no lo dudéis ni un instante: la vida es más fácil cuando seguimos nuestras propias reglas en lugar de actuar según lo que los demás esperan de nosotros o, mejor dicho, según lo que creemos que esperan de nosotros.
Conclusiones
Aquí Cazadividendos, vuelvo a coger el teclado yo… La verdad es que no me iría mal hacerme la lista de normas. Hay unas cuantas que me han calado hondo, como la de dormir suficientes horas y comer bien, la de no comprometerse a cosas que no quieres, la de rehuir los conflictos que no aportan nada o alguna que se leía entre líneas como saber decir «no». Sólo aplicando estas cuatro mi calidad de vida y la de mi familia mejoraría sustancialmente.
Entonces…. ¿por qué no racionalizarlas escribiéndolas y autocomprometerse a cumplirlas? Supongo que me falta inteligencia emocional y asertividad. Y mira que he hecho cursos donde se explicaba la conveniencia de hacer esto, pero una cosa es saberlo y una muy distinta aplicarlo.
¿Y tú? ¿Tienes reglas parecidas a las de José Manuel? Si las tienes, ¿puedes compartirlas con la comunidad? Seguro que hay cosas muy importantes que en el día a día olvidamos y que nos irá bien recordar. Y si no las tienes ¿el artículo te motivará para reflexionar sobre ellas?
¡Que tengas buena caza!
Y si quieres saber más…
Si quieres una explicación general sobre el camino hacia la independencia financiera lee esta página. Si prefieres entrar en profundidad, aquí tienes las diferentes etapas del camino.
Hola José Manuel y CZD.
Soy muy de reglas, normas o hábitos, como hablamos en el artículo de hoy en mi blog.
Me gusta el orden, y creo que la rutina que dicen que mata, a mi me mantiene cuerdo.
Las normas no son más que las directrices de una rutina, lo que puedes y no hacer, lo que debes y no hacer.
Yo añado una regla, que tiene que ver con el compromiso para conseguir objetivos: contárselo a todo el mundo.
En mi entorno todos saben que me quiero "jubilar" a los 60 (actualmente tengo 50 años) y algunos me miran como diciendo, "pero de que vas", pero mis mas allegados, mis hijos y mi mujer, me apoyan y saben que estoy en el camino correcto.
Es como quemar las naves. Cuando tienes un compromiso tan fuerte, no te queda más remedio que cumplirlo.
Un fuerte abrazo.
Hola, Miguel,
A mi me ocurre algo parecido: si le explico a todo el mundo mis proyectos futuros me siento "obligado" a no dejarlos.
Igual es lo que dice Dalamar más abajo y tiene que ver con el miedo al qué dirán, pero yo prefiero verlo como un acto de reafirmación personal, de interiorización de objetivos y de forzarme a valorar si lo que estoy diciendo es realmente posible o me estoy embarcando en algo completamente irreal.
Es lo que tiene ser un poco fantasioso, que a veces te pones a perseguir molinos y necesitas algún bañito de realidad. En ese punto también es bueno ser fuerte y ser un pelín testarudo, porque el entorno suele tender a desanimar que a animar y tienes que saber diferenciar el "no se puede" visceral del "no se puede" racional. Normalmente se puede diferenciar porque el primero es dogmático y el segundo es dubitativo 🙂
Un abrazo,
Czd
Buena reflexión.
Estoy totalmente de acuerdo con casi todos los puntos. Demasiadas veces los árboles no nos dejan ver el bosque. Perdemos muchísimas energías luchando en batallas absurdas y nos olvidamos de nuestros objetivos principales.
Para mi es muy importante el orden en la vida. Llevar unos horarios, dormir y comer bien y a su hora. Aprovechar el tiempo y tratar de procrastinar lo menos posible. A partir de ahí creo que las cosas vienen solas.
Quizás con el único punto que no estoy de acuerdo (aunque quizás lo haya interpretado mal) es el de no involucrarme en actividades cuyo único objetivo sea "pasar el tiempo". Para mi también son necesarios periodos de descanso puro y duro. Sin pensar en nada importante ni dedicarte al ocio activo. Quizás simplemente dar un paseo sin rumbo fijo o tumbarte en el sofá a escuchar música con la mente en blanco. Creo que la obsesión por aprovechar el tiempo y llenar todos los huecos de la agenda en actividades productivas llega a ser nocivo.
Y muy buena idea la de Miguel de contárselo a todo el mundo. Es cierto que por alguna extraña razón, quizás el miedo al que dirán si finalmente no lo hago, nos obligamos más a cumplir lo que hemos expresado en voz alta.
Nuestros comentarios se cruzaron. Justo acabo de escribir algo parecido: la importancia de reservar un tiempo para no hacer nada. Casi lo escribimos con las mismas palabras.
Yo creo que José Manuel va más por el tirarse a ver la tele cada día de 19:00h a 24:00h y no aprovechar el tiempo. O lo que es lo mismo, hacer cosas porque no sabes que hacer. El descanso y el disfrute personal es tiempo muy bien invertido. El problema es cuando lo haces por rutina y realmente no disfrutas.
¿Qué hacemos? No sé. ¿Vemos un rato la tele? 🙂
Yo todos los días tengo mi sesión de "tele", aunque confieso que tengo el ordenador encima y a veces no me entero de "na".
Estoy escribiendo o viendo como van las cotizaciones, de vez en cuando tengo que soltar el ordenador, por que si no termina lo que estoy viendo y no tengo ni idea de lo que han dicho.
Creo que es interesante desconectar de vez en cuando. A veces noto que estoy demasiado agotado, y es por que tengo un enchufe constante…pero esto es así, es otra forma de disfrute aunque no se hasta que punto es sana.
Un abrazo.
Creo que nos pasa algo parecido. La tele de fondo y haciendo con el ordenador lo que de verdad nos gusta jejeje
Yo estoy intentando encajarlo todo para poderme dedicar durante el día a lo que me gusta y dedicar ese tiempo de la tarde completamente a la familia. A ver si puede ser este año…
Un abrazo,
Czd
Tienes razón, Dalamar. Llevar un orden en la vida es muy importante también para mí pero…. ¡Qué complicado es!
Me da la impresión de que nuestra vida es mucho más complicada que la de nuestros mayores. Supongo que es porque yo veo mis miserias y no las suyas, pero tengo la sensación de que la sociedad evoluciona hacia conceptos que "desordenan" la vida. Los niños ya no se crían con las madres sino en las guarderías. El trabajo ha pasado de ser ocho horitas bastante seguidas a dedicar mucho más franja horaria, se cambia de trabajo mucho más, se cocina mucho menos con lo cual se come peor, etc…
¿Qué opináis? ¿Es sólo una sensación mía o pensáis lo mismo?
Una reflexión muy interesante. En cuanto a las reglas concretas, aunque cada uno deba buscar las suyas, estas me parecen muy razonables. Lo de la disciplina y el orden es esencial; los beneficios directos e indirectos que tienen en la vida son increíbles.
Quizás yo añadiría la regla de siempre reservar un rato para el "dolce far niente", para el ocio no programado, para la "contemplación": sentarse a mirar por la ventana, dar un paseo sin rumbo ni objetivo, etc. Hay muchos estudios que lo recomiendan como un descanso para el cerebro, una especie de "meditación" sin reglas y, a menudo, la chispa que conecta conocimientos y hace surgir grandes ideas o llegar a conclusiones que estábamos buscando.
Como se dice en el artículo, el hecho de poner por escrito reglas, objetivos y reflexiones ayuda muchísimo a seguir en el camino que nos habíamos marcado, corregir errores y mantener la motivación.
Saludos!
Hola, Lemuel,
Ese es uno de mis fallos. Me planteo objetivos pero no los escribo, con lo cual acaban diluidos y es difícil ver si los he conseguido o no. Por ejemplo, en el tema de la IF sé que voy en el buen camino porque soy bastante constante, pero, por ejemplo, hace meses que no actualizo mi excel de seguimiento.
La parte mala es que voy un poco descontrolado. La parte buena es que cuando actualizo el seguimiento me suelo llevar sorpresas muy agradables jejeje
Un abrazo,
Czd
Me gustan este tipo de entradas, no solo de inversión vive el hombre.
Antes de tener peques practicaba yoga y el profesor nos recalcaba estos puntos:
· Ejercicio Adecuado.
· Respiración Adecuada.
· Descanso Adecuado.
· Alimentación Adecuada.
· Pensamiento Positivo.
Con los peques casi todos esos puntos (si no todos) se fueron al garete, principalmente por maldormir durante más de 4 años ya. Pero como bien dice José Manuel, "ya pasará…", ahora mi responsabilidad es criar y lo demás es secundario.
El pensamiento positivo es algo que hay que trabajarse y tiene su base en el resto de puntos más la contemplación/meditación que mencionaba anteriormente un lector, no es algo que se consiga de un día para otro.
Un abrazo.
Hola, IIF,
Hacia tiempo que no te veía por aquí 🙂
Me ha gustado tu comentario porque ha salido la palabra "adecuad@" varias veces. Hacer lo adecuado es lo mejor para tener una vida equilibrada y debería ser sencillo, pero creo que, como he comentado más arriba, el estilo de vida actual lo hace bastante complicado. Por eso me parece tan importante autoimponerse una serie de reglas para intentar equilibrarnos.
Lo del pensamiento positivo es fundamental. En mi trabajo todavía se sorprenden cuando responda con un "bien" y una sonrisa de oreja a oreja, porque saben lo estresado que voy. Cuando me dicen "¿pero cómo puedes decir bien con la que tienes encima?" siempre respondo lo mismo. Responder "mal" lo único que hace es que te traspase parte de mi malestar y prefiero ver una sonrisa en tu cara que una mueca de mal rollo. En el fondo todos ganamos. Igual que tu sonrisa me refuerzo, tu mueca de mal rollo me debilita. Ver el lado negativo de las cosas, si no es para corregirlo, lo único que hace es desinflar a la gente.
Un abrazo,
Czd
Buenísima entrada (como de costumbre). Me ha sorprendido muy gratamente la regla de escribir durante una hora y media todos los días…A mí me encanta la escritura y gente de mi entorno dice que escribo y me expreso muy bien. Y tengo que decir que me gusta mucho escribir, y lo que de verdad se me da bien es escribir sobre algo que he vivido, pero soy incapaz de escribir imaginando. No obstante, hora y media al día es tener muuucho mérito.
Yo practico algunas de las que dice, como la de dormir lo suficiente, ser disciplinado (con horarios sobretodo: comida, hora de ir a dormir, de hacer ejercicio…) o no prometer nada si sé que no voy a poder cumplirlo.
Me ha recordado mucho esta entrada al libro: El Secreto, de Ronda Byrne. Lo empecé a leer hace poco y lo tuve que dejar (es muuuy pesado pasado un rato). Básicamente viene a decir, que tener pensamientos positivos atraen otros pensamientos positivos y por tanto cosas buenas. Tiene mucho que ver con lo que se comenta en la entrada.
Lo dicho, grandísimo post y gracias una vez mas.
Un saludo!!
Hola, Invirtiendo Poco a Poco,
Escribir es genial. Creo que todos los que tenemos un blog, como nosotros, lo tenemos clarísimo. Antes de este tenía un blog personal donde daba rienda suelta a mi imaginación y dejaba salir mis sentimientos y emociones. Aunque mi única audiencia era yo mismo, esos escritos eran tremendamente terapéuticos.
Escribir, aparte de los beneficios evidentes para ordenar la mente, es un desestresante natural y además una manera de fijar ideas. El hecho de escribir algo te hace que tengas que entenderlo. Muchas veces damos por hecho cosas que, al intentar explicarlas, vemos claramente que no entendemos. Escribirlas nos hace darles cuerpo.
Respecto a tu último párrafo, supongo que habrás oído hablar de la PNL (Programación NeuroLingüística). Yo tengo muchas ganas de hacer un curso sobre el tema, pero creo que va del poder del lenguaje y el pensamiento para influir en tu bienestar y estado de ánimo. Si piensas en positivo estableces conexiones neuronales que facilitan el pensamiento positivo. Y al contrario. Por ejemplo, si pierdes a un ser querido, y te sientes desgraciado, y lo ves desde el punto de vista de que te has quedado solo y lo pasas muy mal, y lo repites cada día, y se lo explicas a todo el mundo, etc… tardarás mucho más en superarlo que si intentas fomentar pensamientos positivos rememorando lo buena que era esa persona y lo bien que estuviste con ella e intentas pasar página porque a esa persona no le hubiera gustado verte tan triste.
La actitud ante la vida es fundamental. Un mismo hecho se puede considerar problema u oportunidad. Yo prefiero intentar verlo todo como una oportunidad y me molesta tremendamente la gente que siempre ve el lado negativo de todo. Yo prefiero intentar ver el lado positivo.
Qué calor hace Qué bien calorcito
Estoy muy resfriado Hoy es el peor día, seguro que mañana estoy mejorE
Jo, qué cansado estoy Ya es viernes, mañana dormiré un montón 🙂
Mañana llueve Igual por la mañana no y nos da tiempo a ir a desayunar a nuestra panadería favorita
Vaya, ya es domingo Todavía es domingo y tengo toda la tarde para mi…
No siempre lo consigo, pero hay que intentarlo 🙂
Un abrazo,
Czd
Hola Jose Manuel, hola Luis. Totalmente de acuerdo con todo lo expuesto. Algunas de facil aplicacion, otras menos, yo tambien tengo una niña pequeña y lo de dormir va como va.
Es verdad q a veces no somos nosotros sino nuestro entorno quien nos pone impedimentos para cumplir esas reglas, sobretodo si estas rodeado de gente toxica, como yo lo he estado en mi trabajo, y ante esto la solucion es muy complicada, no es facil no llevarse estos problemas a casa cuando el personaje toxico es el jefe, en este caso la solucion es muy radical y muchas veces es la unica posible, como ya sabes Luis.
Para los q tenemos una edad como yo, 55 años, somos mucho mas practicos en nuestra vida y esas reglas las tenemos mucho mas claras.
Un abrazo.
Hola, Miguel Ángel,
Es que la regla número uno debe ser distanciarse de la gente tóxica, sea tu jefe, tu hermana o tu vecina del quinto. Yo tengo vetados a un par de familiares a los que directamente no escucho porque me estropean el día cada día con sus problemas y sus conflictos con otras personas.
Si hablamos del jefe es mucho más complicado, porque está en una situación de poder, pero incluso en esa situación se pueden hacer cosas para mejorar la situación. Tú lo hiciste y creo que muy bien. El coste, sobretodo emocional, es durísimo, pero por lo menos consigues mejorar el balance. Es lo que decíamos antes: hay que intentar obtener el mejor resultado con las cartas que tenemos y hay que intentar lamentarse lo menos posible porque no sean todo lo buenas que hubiésemos querido.
Por suerte, aquello ya pasó. Y en esa línea, una de las reglas de José Manuel es relativizar: pensar que todo tiene caducidad y que, si lo estás pasando mal, acabará pasando también es una buena táctica para aguantar los malos momentos.
Un abrazo,
Czd
De acuerdo con casi todo. Pero lo de los objetivos, creo que es mejor tener un sistema, como dice Scott Adams.
[O]ne should have a system instead of a goal. The system-versus-goals model can be applied to most human endeavours. In the world of dieting, losing twenty pounds is a goal, but eating right is a system.
Goal-oriented people exist in a state of continuous pre-success failure at best, and permanent failure at worst if things never work out. Systems people succeed every time they apply their systems, in the sense that they did what they intended to do. The goals people are fighting the feeling of discouragement at each turn. The systems people are feeling good every time they apply their system. That’s a big difference in terms of maintaining your personal energy in the right direction. …
https://fs.blog/2013/12/scott-adams-fail-at-everything/
Pues entonces yo soy un seguidor de Scott Adams y no lo sabía.
Normalmente pienso más en el cómo (=sistema) que en el qué (=objetivo). Prefiero comer bien y hacer deporte que pensar en adelgazar no sé cuántos quilos en los próximos dos meses, pensar en ahorrar e invertir en vez de pensar en llegar a X euros en diviendos en 2018, etc…
Un abrazo,
Czd
Muy interesante, me gustó mucho el artículo de José Manuel. enhorabuena a ambos.
@investing.saints y <a class='bp-suggestions-mention' href='https://www.cazadividendos.com/usuarios/czd/' rel='nofollow'>@czd</a>, también le doy importancia a tener un buen sistema, precisamente en el blog de Miguel hablamos de cómo instaurar habitos que te permitan progresar en ello. Los objetivos están muy relacionados. Si no tienes un buen sistema, ya sea rígido marcado por unas reglas o adaptativo, es más difícil alcanzar esos objetivos. Especialmente cuando no son fácilmente medibles como en el mundo de la inversión. En value-B&H sabemos que si invertimos con sentido común a la larga alcanzaremos la IF o el objetivo marcado, pero es imposible perseguir un determinado rendimiento para le año que viene o dentro de 4.
Salu2 Cordiales
Hola, Josep,
Ya he leído los tres artículos de la serie que has publicado en el blog de Miguel. Realmente interesantes. Se nota que te apasionan estos temas.
Un abrazo,
Czd
Efectivamente Luís, creo que si tuviese que empezar a estudiar ahora eligiría el campo de la economía del comportamiento, es una vergüenza que aún no se enseñe en las universidades españolas.
La psicología y la neurociencia para tratar de entender al hombre + la economía para tratar de entender al mundo (las relaciones de intercambio entre sujetos). La bolsa es el sitio paradigmático dónde se juntan ambas disciplinas.
Sí, es un tema apasionante. Yo hice en su día en Coursera el curso de Dan Ariely "A Beginner’s Guide to Irrational Behavior", más que recomendable (de hecho deberían enseñarlo en los colegios). Pero veo que ya no lo ofertan, una pena…
Gracias, investing.saints
Me apunto ese curso para ver si lo encuentro. Me gustan mucho los cursos de habilidades, psicología y conocerse a uno mismo.
Un abrazo,
Czd
Qué decir de Ariely, uno de los referentes en este campo. Me entró el gusanillo con sus charlas en TED https://www.ted.com/search?q=Dan+Ariely
¡Magnífico artículo, José Manuel! ¡Enhorabuena! Gracias también a Cazadividendos por incluirlo en la web.
Yo soy también muy ordenado y seguidor de varias reglas (la de relativizar la aplico desde hace muchos años). No las he escrito nunca porque Benjamin Franklin lo hizo por mí. Les dejo su lista de trece virtudes (copiado de Wikipedia):
1.Templanza: no comas hasta el hastío; nunca bebas hasta la exaltación.
2.Silencio: habla sólo lo que pueda beneficiar a otros o a ti mismo; evita las conversaciones insignificantes.
3.Orden: que todas tus cosas tengan su sitio; que todos tus asuntos tengan su momento.
4.Determinación: resuélvete a realizar lo que deberías hacer; realiza sin fallas lo que resolviste.
5.Frugalidad: gasta sólo en lo que traiga un bien para otros o para ti. Ej.: no desperdicies nada.
6.Diligencia: no pierdas tiempo; ocúpate siempre en algo útil; corta todas las acciones innecesarias.
7.Sinceridad: no uses engaños que puedan lastimar, piensa inocente y justamente, y, si hablas, habla en concordancia.
8.Justicia: no lastimes a nadie con injurias u omitiendo entregar los beneficios que son tu deber.
9.Moderación: evita los extremos; abstente de injurias por resentimiento tanto como creas que las merecen.
10.Limpieza: no toleres la falta de limpieza en el cuerpo, vestido o habitación.
11.Tranquilidad: no te molestes por nimiedades o por accidentes comunes o inevitables.
12.Castidad: frecuenta raramente el placer sexual; sólo hazlo por salud o descendencia, nunca por hastío, debilidad o para injuriar la paz o reputación propia o de otra persona.
13.Humildad: imita a Jesús y a Sócrates.
Si no la conocen, les recomiendo su Autobiografía.
Saludos.
Muchas gracias, Alejandro.
Muchas coinciden con las que nos ha presentado José Manuel. De hecho, las trece se pueden resumir en ser moderado (no comer demasiado, no gastar demasiado, etc), ser buena persona (no hables si no es para bien, no te enfades, sé humilde, no mientas, etc.) y ser resolutivo (hacer lo que debes, ser ordenado, no pierdas el tiempo, etc.).
Un abrazo,
Czd
Yo solo vivo en base a una regla. Esta es que tu libertad acaba donde empieza la de otra persona. Me atengo a mi libertad y la intento explotar.
Hola, Luis,
¿Puedes desarrollarlo un poco más? ¿Qué significa "me atengo a mi libertad y la intento explotar"?
Un abrazo,
Czd
Principalmente lo que pienso y en base a lo que vivo es que puedo hacer lo que me venga en gana siempre y cuando no interfiera con otra persona (al menos de forma directa e intencionada). En condiciones me verás haciendo lo que me apetezca sin molestar.
Hola José Manuel y czd.
Tal vez la mejor regla es imponerte no tener ninguna.
Sabemos que es imposible pero si por algo quiero alcanzar la IF es para eliminar muchas e intentar en ampliar las minimas.
Como decia Miguel Angel,con los 50 pasados hay que volverse mas hedonista y pragmatico.
Sera eso,la edad, pero quiero contemplar y vaguear,poco mas jaja.
El mundo seguira igual conmigo que sin mi y haga lo que haga.
Buena entrada para al menos obligarte a reflexionar un poco.
Saludos
Hola, luissb
Yo creo que José Manuel va en la línea de autoimponerse reglas que le harán vivir mejor (comer mejor, dormir más, no comprometerse, etc…). Todas esas reglas te deberían hacer estar mejor y, por lo tanto, ser más feliz.
En mi caso particular, tengo clarísimo que si durmiese más estaría muchísimo mejor. ¿Por qué no lo hago? No lo sé. No es por trabajo, desde luego, porque los fines de semana no duermo más que un día normal… ¿Qué opinas? ¿Me iría bien autoimponerme una regla de dormir ocho horas, por ejemplo? 🙂
Un abrazo,
Czd
Hola czd.
Te haria mejor no autoimponerte nada,simplemente si te apetece pues a dormir,sin mas.
Y si tienes que estar todo el dia en vela por lo que sea…ya dormiras mañana,a eso te lleva o puede llevar la IF entre otras cosas.
Si hablas por el presente pues seguro que te iria mejor si el cuerpo te lo pide,dormir 8 horas pero el tema es si estas en situacion de autimponerte algo que no puedes cumplir.
Esta claro que nunca podremos hacer todo lo que quisieramos pero al menos si intentarlo y cuanto mas "libre" seas,mas posibilidades tendras de conseguirlo.
Hedonismo y pragmatismo,repito jaja.
Un abrazo.
jeje Luissb.
Coincidimos en muchas cosas.
Parece que el hecho de ser autonomos, y tener ya tantas responsabilidades que llevamos incorporadas en los bolsillos y atados al cinturón, influye en nuestra manera de ver el mundo…
Yo por ejemplo, no tengo horarios.
No creo que haya ido a trabajar a la misma hora ni dos días seguidos en toda mi vida. pero si me apetece trabajo un domingo…
Esa libertad y falta de reglas… hace que nos planteamos la Superación Personal como un mejorarse a sí mismo sin reglas, cuando no como un disfrute del momento, que como aprendizaje y resultados puede ser mejor que el fijarse muchas metas reglas y objetivos.
Aunque reconozco que una dosis de los últimos, pueden ser un catalizador…
Asi es Prekestolen.
Por eso ha llegado el momento de que alguien recoja el testigo y si no hay nadie,pues que se busquen la vida como hicimos los demas.
Es lo que hay.
Saludos.
Muy buen artículo, José Manuel.
Cuando dices que escribes hora y media cada mañana, uau, es mucho. ¿Estás escribiendo un libro o escribes diarios o reflexiones diarias?
La filosofía de vida es fundamental, muy importante y valiosa.
Me recuerda mucho a la filosofía que abunda ahora, como el Secreto, los libros de Robin S. Sharma (El Monje que vendió su ferrari, etc.)
¿Has leído alguno de éstos libros?
Una cosa que veo interesante:
Tener reglas no significa que se cumplan todas, o que se sea capaz de cumplirlas, sino que se aspira a cumplirlas o se lucha por cumplirlas cada vez más…
Normalmente uno lee sus libros apuntes o reflexiones filosóficas sobre lo que debe hacer, pero luego se da cuenta que no lo ha hecho: no identificarse consigo mismo en tener razón en una discusión, ponerse en el lugar de la otra persona…
¿os ocurre a vosotros?
Supongo que ahí está el camino del mejoramiento personal, la aventura de conocerse y cambiar lo que queremos mejorar….
Si cumpliéramos todas nuestras reglas que definimos en un papel, seríamos casi perfectos!!!
Hola, Preikestolen
Para mi esto que comentas:
"Normalmente uno lee sus libros apuntes o reflexiones filosóficas sobre lo que debe hacer, pero luego se da cuenta que no lo ha hecho: no identificarse consigo mismo en tener razón en una discusión, ponerse en el lugar de la otra persona…
¿os ocurre a vosotros?"
es un problema. Proponerme cosas que luego no cumplo me causa una intranquilidad interna grande. Por eso me suelo proponer pocas cosas pero intento cumplirlas a rajatabla. Eso exige una gran pericia valorando lo que es un objetivo alcanzable y lo que es una utopía.
Un abrazo,
Czd
Hola Czd.
Estás leyendo y viviendo éste artículo desde una reflexión en tí mismo, para aprender.
Entiendo que así eres también en la inversión.
Cuando una persona escribe unas reglas, puede venir, en mi opinión:
a)- de que las ha ido asimilando y creando dentro de sí mismo.
b)- de que las ha leído y asimilado a través de lecturas.
Creo que el camino
a) practicar y vivir mis reglas, es mucho más lento. lleva toda una vida, como la inversión.
El camino b) escribirse unas reglas, es más fácil y rápido
pero es como el plan de acción de una empresa…
está expuesto al riesgo de ejecución, es decir… hay que hacerlo….
Cualquier persona que haya acudido a un seminario de psicología, curso, etc… ( o leido determinados libros…) cómo sale?
Con las pilas cargadas, se come el mundo, va a hacer todo lo que ha escuchado, aprehendido y no va a caer en los errores de "antes"…
pero al cabo de 10, quince días…. esa fuerza ha pasado…
y al cabo de un mes o dos no se acuerda Conscientemente de casi nada del seminario y posiblemente haya puesto en práctica solo una o dos cosas importantes…
(y uno se ve discutiendo con su cuñada por una cosa nimia sin ninguna capacidad de respirar hasta diez y decir : "no importa si tengo o no razón… voy a parar y ser positivo…)
Por eso es importante el trabajo de LEER, APUNTAR, revisar los apuntes, los objetivos… las reglas… y hacerse consciente de qúe queremos… para volver a entrar en los raíles de la superación…
( esto es como si uno quiere comprar JNJ y Ko para el largo plazo y de repente se pregunta: ¿por qué compré ayer abengoa ????
Por eso, creo yo
que entre ponerse Reglas
o no ponerse reglas sino dejarse fluir según el sentir…como comentan arriba…
está el punto de equilibrio que cada uno debe encontrar…
para que no ocurra lo que tú dices:
"me siento frustrado pues no puedo cumplir las reglas que me pongo" y eso nos lleva a sentirse "peor" en lugar de "mejor"…
salud
Es decir, que además de escribir las reglas es bueno revisarlas para reforzarlas (o adaptarlas) y no caer en el desánimo. ¿Es eso?
Bueno.
Lo has esquematizado mucho, jeje.
Creo que en la Superación personal hay que ser Buy $ Hold suave… es decir… ir mejorandose pero sin dejar que las metas objetivos reglas y resultados te presionen..
Es decir, no hay que ser trader… lo que llevaría a sentirse mal cada vez que no hemos cumplido una regla…
Uno deja las reglas y olvidarse del sistema, es decir, abandona, creo yo por dos actitudes hacia uno:
– ser tan condescendiente que siempre te perdonas por no cumplirlas
– ser tan autoexigente que siempre te amargas por no cumplirlas…
Creo que hay que buscar el término medio.
Pero bueno, creo que estamos yendo más allá incluso del texto planteado.
Una cosa es tener unas reglas que nos hagan la vida mejor.
Y otra es cambiarse o mejorarse a sí mismo, que es un reto dificilísimo y es ya sicología aplicada pura.
Como dice José Manuel:
-RELATIVIZAR
-NADA ES PARA SIEMPRE
-Intento evitar cualquier enfrentamiento o conflicto,
son tres puntos de partida fenomenales para todo.
Y como el mismo autor dice:
"intento" evitar… demuestra que no es facil.
Intentar significa que no siempre se consigue…
Hábitos. Costumbres.
Sobre las Costumbres, que hablaba Miguel Illescas hace poco,
hay autores que sostienen que un acto repetido durante 21 días seguidos se convierte en una costumbre.
Por ejemplo, una persona que no se levanta pronto, e intenta levantarse a las 6 o 7 (para leer, escribir, oir musica…) es posible que la fuerza voluntad no nos dé para hacerlo…
se convierte en un deseo que siempre quiero hacer pero no hago…
Algunos autores sostienen que si lo haces 21 DIAS seguidos, rompes el hábito anterior, y creas un nuevo Habito o costumbre…
A veces siento una especie de vergüenza de no tener ningún ideal político, ninguna creencia y en nada absolutamente, ninguna meta definida, nadie a quien seguir o emular, ninguna idea que distraiga mi pequeña marcha.
Debe ser la ventaja de ser medio analfabeto o analfabeto completo, y como siento y veo el mundo, con sus desidias, retorcimientos y luchas intestinas, dando cobijo a toda clase de personajes, que se creen “iluminados”, tratando de imponer y por la fuerza: sus razones? Cosa que siempre y desde mi uso de razón, me parecieron irracionales, y siempre las cuestioné, y probé el sabor del dolor por tal motivo, pero la respuesta no estaba en el dolor, no en POR LA FUERZA, y aún sigue sin estar en esos ámbitos, porque la razón del PORQUE SI, no sirve ni para su promotor.
Será tal vez por mi falta de docencia, mi ausencia de sapiencia, mi irreverencia por cualquier cosa implantada, por los implantadores de turno (valga mi redundancia), por los sesudos (creen ellos), portadores de la verdad luminosa, que enciende y da luz a la mente del planeta, ellos lo llaman de otra forma, pero repetir esos nombres me produce urticaria, y de momento ya me está entrando picazón por semejante parte y por toda esta carcasa mía…
…Mira, si vamos a seguir charlando, porque no dejamos lo intangible fuera de esta conversación? Y nos atenemos a lo físico y palpable, y así no me haces sentir incómodo?
¡AH! Pero tu no crees en nada?
No, y en nadie tampoco, pero…, eso me hace tener menos calidad de ser humano? Menos confiable, menos persona? O ser gente es ser servicio o servidor de…, ideas disímiles de lo que se cocina en propia mente?
En la búsqueda incesante de razones para existir, cada quien busca la sombra que mejor se adapte a lo que cree son sus necesidades, a sus ilusiones o miedos ancestrales, que deben estar escritos en los genes, que se manifiestan cuan do alguna situación pone en marcha el mecanismo, y tiene que dar respuesta a alguna pregunta, y siente que ha de llenar algún espacio vacío, y no se por cual circunstancia siempre hay un “iluminado”, que viene a contarte como fue, se inventa un cuento o te lo relata de memoria y te lo vende, pelado o sin pelar, pero te lo vende, y te reclamará su pago.
Ese sedante para tu mente, esa respuesta que necesita tu cuestionamiento, te ha sido servido casi en bandeja, no lo solicitaste, pero el oportunista estaba ahí, para sacarle partido a su arte, emulando a los “humildes comerciantes fenicios”.
Lo jodido debe ser para ese vendedor, cuando no encuentra la caja de resonancia, cuando no puede colocar su producto, y siempre habrá un díscolo no creyente en ideas foráneas, que no las comprará a precio alguno, y que no se acercará a ellas ni regaladas, por tal motivo el comerciante de la idea ha de retornarse por donde llegó, sin poder desprenderse de su carga o cambiarla por un precio no fijado convenientemente de antemano, con lo cual el comprador se ve obligado a pagar de por vida, y es que son muchas centurias de oficio aprendido, y trasmitido de generación en generación.
Si, a uno lo miran extraño, parece que “algunos” piensan que uno va a arder en la quinta paila del quinto infierno, del quinto nivel, de los muchos que dicen los versados que tiene ese quinto infierno, aunque ninguno de los vendedores jamás lo ha visto ni ha estado ahí ni con los ojos cerrados o vendados, solo son ensoñaciones y estrategias de venta.
Pero bueno, me pondré a dormir y mañana será otro día, con sus problemas grandes y pequeños, nada diferente al hoy, pero seguro que con algo nos desayunamos, si conseguimos traspasar el umbral de la noche.
Según estaba esta mañana transcribiendo esto, y con las noticias frente a mi, mediante la caja tonta, no he tenido otro remedio que soltar una carcajada, pues ha salido a la palestra la noticia que ahora ya no son solo 7 los pescados capitales, de un solo carajazo los han convertido en 14, de tal guisa que será mas difícil sortearlos todos, y “”Pedro Botero”” estará mas contento.
Uno de ellos parece que es acumular riquezas, pues bien, ahí se han puesto el dogal en el pescuezo, ya que llevan cerca de 2.000 años acumulando ORO, OBRAS DE ARTE, MAS ORO, MAS PROPIEDADES, y siempre a costilla de la miseria ajena, parece que están enfilados a esa quinta paila, ja. ja . ja.
¡Y cosas veréis Sancho, que os llenarán de
Muy interesante el artículo donde resumiendo lo podemos dividir en dos bloques: uno sobre con que reglas queremos organizar nuestra vida y un segundo sobre la evolución propia de nuestra conciencia como seres humanos.
Estamos organizados como sociedad bajo unas reglas y normas que nos permiten convivir los unos con los otros por lo que hay que descartar el "hacer o vivir como a uno le dé la gana" y adaptar y aceptar imperativos que si fuera por motu propio muchos no acataríamos.
Sobre las reglas de la vida sana: dormir, comer, hacer deporte, la vida en pareja (que abarca desde el sexo hasta el compartir momentos de ocio) o el desconectar de la rutina lo intento explicar a continuación.
En el años 2010 uno se levantaba sobre las 7.00h no sin dificultades y teniendo que cambiar periódicamente la sintonía del despertador para que fuera efectivo. Ducha y me preparaba un pequeño desayuno, 1 hora de coche hasta el trabajo y salida de este sobre las 18.30 para ir al gym hasta las 20.00h. Llegar a casa, cenar sentado en la mesa con mi mujer mientras charlamos de lo que sea. Luego juntos al sofá o en la cama donde ver un rato la tele o echar un quiqui o ambas a la vez. Dormirse sobre las 23.00 o las 0.00h y mañana un nuevo día. Los fines de semana estaban llenos de salidas y actividades.
Año 2017. Uno se levanta sobre las 5,30h sin necesidad de despertador (hace años que no tengo). La misma ducha y salida cagando leches al trabajo sin desayuno donde llego sobre las 7.00h para adelantar tareas que me dejé pendientes ayer. Salida sobre las 17.30h dejando tareas pendientes de hacer. Cagando leches para casa. Hay 3 niños.El que no tiene entreno de futbol, lo tiene de basket y queda el pequeño que hay que pasear.Llegar a casa y mientras los baño, su madre les prepara la cena. O le doy la papilla al peque y su madre está encima de los otros dos o a la inversa. Después mientras dejo que mi mujer que se duche, duermo primero al peque y después me voy a la habitación de los otros dos (6 y 3 años) a contarles cuentos hasta que se duermen. Cuando acabo son las 21.00h pasadas. Es momento de poner lavadoras y limpiar cacharros. Para cuando terminamos, mi mujer y yo ya estamos ko con lo que nuestra cena se reduce a comer lo que ha sobrado de la cena de los niños (y nada de sentarse en la mesa sino a la vez que uno va poniendo lavadoras o preparando las mochilas del cole del día siguiente). De ahi a la cama. Ni tele, ni sexo ni nada de nada. Ni 5 segundos duro una vez pongo la cabeza en el cojín. El pequeño sobre la 1.30 o 2.00 pedirá su biberón. Toca levantarse una noche a cada uno. Y mañana a las 5.00 o 5.30 vuelta a empezar. De los fines de semana mejor ni comentarlos, jejeje.
Qué quiero decir con esto? Que está muy bien autoimponerse reglas en materias de salud: dormir 8 horas, hacer 5 comidas al dia y además comer sosegadamente y masticando lentamente sentado en una mesa, hacer deporte diario, etc, etc. Después vienen las circunstancias que te marcan qué puedes hacer y qué no puedes hacer. Y eso da igual si lo escribes en un papel o lo pegas en el espejo de baño en forma de recordatorio. Y no comento que yo necesitaría un día que tuviese 36 horas porque esas 12 horas extras también las absorbería mis hijos.
Sobre la segunda parte, la que hemos llamado conciencia. Hombre pues lo normal es ir evolucionando a mejor. Cuando tienes 18 años el momento más importante de la semana era cuando te ibas a la disco con los amigos y el momento más feliz de tu vida el día que vistes al Barça ganar la Champions en Wembley en 1992. Conforme vas siendo adulto, vas madurando y del mismo modo que tu mejor momento de la semana y el mejor momento de tu vida viran hacia cosas más trascendentales uno mismo tiene una visión de la vida diferente donde mira al pasado para aprender de los errores con la vista puesta en el futuro. Y claro que uno deja de entrar en discusiones absurdas pero tanto como para lograr evitarlas por completo, personalmente yo aún caigo de vez en cuando especialmente si me sacan de quicio (y eso que soy una persona extremadamente tranquila y pausada). Y es que a pesar de que uno va puliendo y forjando su carácter a lo largo de los años a veces se hace difícil no contestar como por ejemplo dicen más arriba si tienes una cuñada que sólo suelta una gilipollez detrás de otra o tienes una tía segunda que se apunta a todas las comidas y te taladra las sobremesas con la pena que le da la Pantoja. Sabes a los 5 segundos de haber contestado que deberías haber callado pero somos humanos y aunque no saltemos como lo hubiésemos hecho con 20 o 30 años menos (no por falta de ganas sino por la propia evolución del saber que es una pérdida de tiempo) a veces es inevitable.
Y esa evolución nos conduce a cada vez entrar menos en discusiones que no llevan a ninguna parte. Por ejemplo, en este magnífico foro que ha creado CZ hubo una presentación bastante insultante (y a posta que es peor) y de falta de respeto hacia una parte de nuestra comunidad. La primera reacción fue contestarle pero mejor contar hasta 10, dejar que se pase el calentón y decidir ignorar a este usuario totalmente. Contestarle no hubiese apaciguado mi calentón sino que posiblemente lo hubiese incrementado vistas sus respuestas a otros usuarios. Eso que me evité.
Para cerrar que me alargo. Creo que la mayoría de los que nos paseamos por aquí que tenemos un plan de inversión a largo plazo ya dice mucho de nuestro plan de vida en general. No creo que seamos gente que improvisa sino más bien gente organizada tanto en modus vivendi como en conciencia. No creo necesario escribirnos en un papel unas reglas porque es muy posible que diversas circunstancias nos impidan llevarlas a cabo a rajatabla. Mejor tener un plan o un guión y sobre él ir incorporando aquello que nos beneficie o nos haga la vida mejor.
S2
Hola, Jordi RP,
Me he sentido muy identificado con muchas de las cosas que has dicho. Si yo con un niño me veo reflejado en la jornada que has descrito, no quiero ni pensar lo que debe ser con tres… Supongo que el poco tiempo que me queda para el blog se reduciría a cero.
Pero precisamente esa imposibilidad de cumplir las reglas que nos harían estar mejor es lo que me hace plantearme cosas. Si no duermo lo suficiente, si no como bien o a las horas que debería o con la calidad que debería, si desde que me levanto hasta que me acuesto no paro un momento y todo son obligaciones, entonces es posible que esté haciendo algo mal o que, por lo menos, podría intentar hacer las cosas de otra manera.
Y esa es la razón (mi razón) fundamental de estar en este camino: tener un poco de flexibilidad para poder mover nuestra vida hacia algo que nos guste más que lo que tenemos ahora.
En este caso, las reglas, aunque no las podamos cumplir, nos servirán para tomar conciencia de que tenemos que cambiar cosas y de impulso para empezar a cambiarlas.
Porque si las cosas no están como nos gustarían que estuvieran…. algo habrá que hacer, ¿no? Si no nos convertiremos en uno más de ese 99% que se quejan de que hace calor, pero no llaman al técnico para que les arregle esa ventana que no se abre, no han pedido presupuesto para instalar el aire acondicionado y se empeñan en hacer las visitas a los clientes a las tres de la tarde…
Un abrazo,
Czd.
Hola Luís.
En parte es como dices pero la IF no te librará de tener que levantarte a las 3 de la mañana porque uno llora, otro quiere beber agua o el tercero está enfermo.
Lo que intentaba decir con mi escrito es que hacer planes está bien pero rara vez se cumplen tal como los diseñamos en su comienzo. La clave es el fondo del plan y saber que no será una linea recta sino con muchas curvas y difurcaciones.
Sin ir más lejos, tú o yo cuando diseñamos nuestra primera estrategia en la inversión en bolsa en busca del camino de la IF poco se parece al que estamos desarrollando ahora. Pero el fondo y la meta es la mismo.
No estoy para nada en contra de autoimponerse unas reglas o códigos de conducta, al contrario. Pero mi experiencia me dice que hay que estar preparado para no poder cumplirlas por los factores que sean. Y la autodisciplina está muy bien pero tampoco es plan de vivir la vida como si fueramos un monje budista. En mi casa hay como norma comer todos juntos en la mesa los fines de semana sin tele porque son los dos únicos días que podemos hacerlo. Eso no significa que un día de vez en cuando pidamos una pizza y comamos en la mesa del sofà delante de una peli de dibujos animados.
Creo que se me entiende lo que quiero decir.
Y yo me voy adaptando. Estamos ya en la segunda quincena de febrero y tengo por hacer todos los informes económicos de todos los miembros de la familia del 2016. Y lo peor es que todos los tengo empezados con lo que cada vez que me pongo tengo que dedicar un valioso tiempo a repasármelos porque el paso de los días hace que no los tenga frescos. Pero es lo que hay y encantado que sea así. La alternativa sería que me sobrara tiempo y sinceramente no lo cambio.
PD: escribirte esta contestación ha costado 6 interrupciones, jejejeje
Entendido. Creo que en el fondo estamos diciendo lo mismo.
Cuando dices "la IF no te librará de tener que levantarte a las 3 de la mañana porque uno llora, otro quiere beber agua o el tercero está enfermo" estás en lo cierto. Pero la IF (o tener más opciones por tener unas ciertas rentas pasivas, que la IF suena muy lejana) te puede permitir modular la otra parte: cambiar de trabajo a uno que te permita cumplir tus reglas (dormir más, comer mejor, estás más con la familia), reducir la jornada laboral, pedir una excedencia, …
Si lo piensas bien (y hasta ahora no me había dado cuenta), intentar cumplir tus reglas, las que te permitirán ser feliz, es un motivo más para seguir en este camino.
Un abrazo,
Czd